Entonces Dios le da un extraño mandato y le dice al profeta profetiza sobre estos huesos y diles: "He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová"
Ezequiel obedece y de inmediato sitió un temblor y un gran ruido y vió cada hueso juntarse con el que correspondía y los tendones y músculos y la piel ponerse en su sitio, pero aún no había espíritu en ellos.
Entonces Dios le dice profetiza al espíritu:"Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán."
Y vino el Espíritu de los cuatro vientos y los muertos vivieron y hubo un gran ejército sobre la tierra.
Este pasaje hace referencia a Israel como Dios lo restauraría a pesar de todas las persecusiones e incluso a pesar de sus propios pecados. Pero hay principios aplicables para nosotros como iglesia hoy.
- En tiempos difíciles hay dos cosas que nos pueden sostener primero la fe y después la obediencia. La lógica humana no sirve de mucho ante la sabiduría de Dios, parece una locura profetizar a huesos secos pero Ezequiel lo hizo y vio un tremendo milagro de parte de Dios.
- Para creer y obedecer es imprescindible escuchar la Palabra de Dios, estamos en un mundo lleno de ruido, necesitamos escuchar a Dios es indispensable buscar el silencio para poder escucharle.
- Recordar cuando nos vemos en situaciones angustiantes que Dios tiene todo el poder para hacer todas las cosas que nosotros vemos imposibles.
- La iglesia así como Israel también tiene promesas de restauración, Jesús dijo respecto a la iglesia: "y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella"
HIJO DE HOMBRE, ¿VIVIRÁN ESTOS HUESOS?